Mini cakes de queso crema y mermelada de fresas

El sabor del queso crema con la mermelada de fresa es espectacular, lo había probado en bagels o sándwiches pero nunca en mezcla de torta y créanme me convertí en una creyente, me dieron hasta ganas de ponerme a experimentar más adelante con galletas o waffles, ya les contaré qué tal.

Me considero fanática de los desayunos y estos buns son buenísimos. Si los preparas en la noche y te los llevas al trabajo o si tienes un brunch, los preparas esa misma mañana tempranito, los colocas en una cestica y créeme que quedas como Martha Stweart sin mucho esfuerzo. Yo siempre hago mi propia mermelada pero si estás apurada también puedes comprar una hecha en el supermercado, a mí personalmente me encanta la Bonne Maman y tengo varios sabores de esa misma marca en la nevera.

Debo confesar que he construido muchas amistades sobre la base de regalar postres, pero ya va, no me juzguen. Para comenzar, soy una persona bastante tímida por lo que eso de hacer amigos por todas partes conversando con ellos de la nada, no se me da mucho pero pasa algo dentro de las personas cuando llegas con un detalle delicioso sin razón alguna, es como que a partir de ese momento sienten que hemos sido amigos desde hace mucho y entonces se derrumban barreras sin importar la edad, el género o la cultura. Entonces ya saben, si son tímidos, los dulces son el camino hacia el corazón de las personas desconocidas incluso las que no comen azúcar o son fit, para ellos también hay opciones.  Les prometo que estos mini cakes de queso crema y mermelada les van a conseguir amigos nuevos, suavizar el corazón a tu jefe o te ayudarán a ganarte a tu suegra en esa primera visita a su casa. 

INGREDIENTES

Para los buns

-        1 ¾ de taza de harina todo uso

-        1 cucharadita de polvo para hornear

-        1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio

-        ¼ de cucharadita de sal

-        1 taza de queso crema a temperatura ambiente

-        ½ taza de mantequilla sin sal a temperatura ambiente

-        1 taza de azúcar

-        2 huevos a temperatura ambiente

-        ¼ de taza de leche

-        ½ cucharadita de extracto de vainilla

 Para el topping: 

-        200gr de fresas picadas, mientras más maduras mejor ( las puedes picar como prefieras, a mi me gusta por la mitad, así me queda una mermelada o conserva un poco más gruesa.

-        ½ taza de azúcar

-        1 chorrito de limón

Para decorar

-        ¼ de taza de azúcar pulverizada

PREPARACIÓN

1. Precalentar el horno a 350 ºF o 180 ºC.

2. En una olla mediana a temperatura alta coloca las fresas picadas y las dos tazas de azúcar. Deja cocinando por unos 30 minutos a fuego medio mezclando siempre hasta que los granos de azúcar se hayan disuelto. Con una cuchara de madera aplasta las fresas  restantes y agrega un chorrito de limón. Sigue cocinándolas durante unos 10-15 minutos hasta que se formen burbujas lentamente y haya trozos de fruta en la superficie de la mermelada. Apártala del fuego y déjala enfriar.

3. Engrasa con mantequilla o PAM un molde para  muffins o buns.

4. En un bowl pequeño, combina la harina, el polvo para hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Apártalo.

5. En otro bowl más grande con la batidora encendida a velocidad media, bate el queso crema, la mantequilla y el azúcar hasta que esté bien cremoso. Aproximadamente 3 minutos. Agrega los huevos hasta que estén bien integrados.

6. Agrega los ingredientes secos en dos partes, alternando con la leche y la vainilla. Una vez esté todo integrado no batas la mezcla mucho más ya que la puedes pasmar o traumatizar jaja como le digo yo a mi mamá cuando me ayuda a cocinar.

7.Llena las cavidades del molde llenándolas hasta un aproximado de dos tercios de la misma. Agrega una cucharadita de mermelada de fresas en la parte superior de cada uno y utilizando un palillo vas a combinarla con la mezcla de los buns en forma de remolino o como te parezca más bonito. No te excedas con la mermelada porque va a pesar más que la mezcla y se va a ir hasta el fondo, lo que va a dificultar el proceso de desmoldar más adelante. 

8. Hornea durante unos 25-30 minutos o hasta que insertes un palillo y salga limpio.

9. Deja que se enfríen los buns por unos 30 minutos y decóralos espolvoreando azúcar pulverizada sobre los mismos.